90 días que se pasaron volando...en los que hicimos mucho pero que igual quedó mucho por hacer. 90 días que estuvo mi mami de visita, en que nos disfrutamos, compartimos y tratamos de recuperar todos aquellos momentos que se pierden cuando uno vive lejos de la familia.
Yo estuve trabajando casi todo el tiempo, así que el que más aprovechó a mi mama fué mi hijo, quien estuvo de vacaciones del jardín y estuvieron por completo "conociendose", yendo a parques y jugando. La ventaja de la época eran los días largos así que logramos disfrutarnos mucho. Comimos rico, cosas de aqui y de allá, en casa y fuera de casa; visitamos lugares a los que no habíamos ido, hablamos de todo, reimos y pasamos bueno.
Lo que más me gustó fué la camaradería que se formó entre mi mama y mi hijo, definitivamente la única cosa que no me gusta de vivir aqui..que no puedan tener un contacto más cercano y/o directo frecuentemente. Espero, que mis planes se cumplan y el próximo año poder reunirnos nuevamente.